Cambios en diseño, interior renovado, tres nuevas motorizaciones, más seguridad y tecnología son algunos de los ítems en los que la SUV del óvalo evoluciona considerablemente y que repasamos en esta nota. Además, primeras impresiones de manejo.

La renovación de la EcoSport llega a casi 20 años de su idea inicial. Sí, aunque suene extraño o hasta exagerado, la realidad es que, según los propios responsables de producto, la gestación del Proyecto Amazon que dio como resultado la primera generación del SUV (presentada en 2003) comenzó en 1998. Su esencia fue la de crear un vehículo aspiracional, con una imagen y versatilidad que lo asemejara a los todoterreno más populares de la marca –como el Escape o el Explorer-, pero con un precio accesible. Para ello se decidió utilizar la plataforma del Fiesta, que con los ajustes necesarios –principalmente un mayor despeje- dio como resultado la creación de un nuevo segmento: así nacieron los B-SUV.

El éxito fue tal que por momentos apenas se pudo abastecer a la impresionante demanda. Con el tiempo surgieron varios rivales, desde versiones Cross –las que normalmente reconocemos por su look aventurero, hasta B-SUV’s de otras marcas, pero la EcoSport se mantuvo como líder indiscutida.

La segunda generación reflejó la misma evolución que mostró el Fiesta, tanto en estética –con la adopción del Kinetic Design- como en tecnología y seguridad. Pero también marcó otro hito fundamental en su historia: siguiendo la estrategia One Ford, pasó a ser un modelo global, expandiéndose a más de 140 mercados de todo el mundo y fabricándose en 5 plantas distintas (Brasil, India, Rusia, Rumania y China, más una en Venezuela, donde se ensambla con partes importadas o CKD).

A 5 años del debut de esta generación y con nuevos o renovados rivales que se sumaron a la categoría o lo harán próximamente, el producto del óvalo volvió a renovarse, con el objetivo de seguir manteniéndose al frente del segmento que nació en Sudamérica y hoy es uno de los más demandados en todo el mundo. Pero también con un nuevo desafío, conquistar el exigente mercado de Estados Unidos, donde se venderá por primera vez proveniente de la planta de India.

Tanta es la importancia y los cambios que recibió la EcoSport que aunque se trata de un profundo restyling –estético y mecánico-, Ford la considera como una tercera generación. Para conocerla en detalle, la firma del óvalo organizó un multitudinario evento en Mar del Plata, en el que, además de la presentación correspondiente, pudimos tomar un primer contacto al realizar un test drive de algo más de 70 kilómetros, partiendo desde el centro de la ciudad balnearia hasta la bodega Trapiche, en Chapadmalal.

Aquí un informe con todos los 10 puntos a destacar de la nueva EcoSport:

1. Diseño:
Es lo que primero que se ve, el best seller de la región adoptó el ADN global de las SUV’s de Ford, con rasgos que la acercan a la Kuga y al Edge, especialmente la parte frontal donde resalta la nueva parrilla trapezoidal, nuevos faros más estilizados, con proyectores y luces diurnas de Led y un capot con nervaduras más acentuadas. Además, en la variante Titanium los faros principales son de xenón. De perfil se rediseñaron los espejos y estrena llantas de aleación de 16 o 17 pulgadas según la versión.

En la parte trasera las modificaciones son aún más sutiles, sólo reemplaza la manija de apertura del portón por un botón. Lo que sí se mantuvo inalterable es la rueda de auxilio colgada sobre el portón, que, aunque en el mercado europeo se reemplazó por un kit antipinchazos, en nuestra región permanecerá alojada allí. Según Gustavo Oneto, Gerente de Producto, el principal motivo es que los usuarios identifican a esta característica como parte de la esencia del modelo.

2. Interior:
Sin dudas, es el cambio más notorio. El tablero fue rediseñado por completo, luce más moderno, de mayor calidad –posee apliques soft touch- y más sofisticado, con la pantalla del sistema multimedia tipo tablet y un nuevo instrumental electroluminiscente, que brinda mayor información y luce más ordenado. Estrena comandos para el aire acondicionado/climatizador y por debajo, dos útiles puertos USB. Las butacas también son nuevas, más anchas y cómodas, las de las plazas traseras cuentan con una mayor ángulo de inclinación en el respaldo, aunque ahora son fijas –ya no se pueden desplazar longitudinalmente-. En la variante Titanium, el tapizado de cuero, revestimiento de la parte baja del tablero y los paneles de las puertas son de color arena, lo que le aporta mayor luminosidad al habitáculo.

3. Tecnología:
Como señalamos en el ítem anterior, al rediseñarse por completo el tablero, el sistema multimedia adoptó una pantalla flotante tipo tablet, de distinto tamaño de acuerdo a la versión. En la S es de 4,2” a color (no táctil, se comanda a través de botones), para la SE es de 6,5” (táctil) y para Freestyle y Titanium es de 8” (táctil) con navegador y cámara de marcha atrás. Con el foco puesto en la conectividad, en todos los casos cuentan con tecnología Sync 3 y comandos por voz, en las que son táctiles agrega compatibilidad con Android Auto y Apple Car Play.

Otro punto a destacar es el sistema de audio Sony de alta fidelidad, con 9 parlantes (woofers delanteros de 6,5”, tweeters de 1”, parlante central de rango medio de 80 mm y traseros coaxiales con tweeters de 1”).

4. Versatilidad:
Las SUV fueron ocupando el lugar de las rurales, monovolúmenes e inclusive hasta el de los sedanes, al contar con un gran espacio interior como para un uso familiar. Pero también se busca que el habitáculo sea modulable y pueda adaptarse a las necesidades de los usuarios, por eso la EcoSport cuenta ahora con el sistema Flip & Fold, que permite rebatir fácilmente los asientos traseros –de forma total o parcial- y ofrecer con un piso completamente plano, otorgándole una capacidad máxima de 1.178 litros. Además, el baúl puede dividirse en tres niveles.

5. Seguridad:
El equipamiento de seguridad también recibió mejoras notables. De serie, todas las versiones cuentan con los obligatorios doble airbag y ABS (con distribución electrónica de frenado y asistente al frenado de emergencia) junto con anclajes Isofix, pero ahora suman control de estabilidad (ESP), control de tracción (TCS) y asistente al arranque en pendientes. Las variantes Freestyle y Titanium suman airbags laterales, de cortina y de rodilla para el conductor (7 en total), Advance Track con RSC -un sistema que controla y minimiza el rolido de la carrocería- y medidor de presión de los neumáticos.

6. Motorizaciones:
Una de las novedades más importantes de la renovada EcoSport es su oferta mecánica, con tres opciones distintas:

La principal es el estreno del motor 1.5 Dragon, un tres cilindros aspirado, de 12 válvulas, con block y tapa de aluminio, doble árbol de levas a la cabeza con distribución variable (TiVCT), cigüeñal con eje de rotación desplazado, bomba de aceite variable y múltiple de escape integrado a la tapa, que desarrolla 123 CV a 6.500 rpm y 151 Nm de torque a 4.500 vueltas. Puede acoplarse a la transmisión manual de 5 marchas o a una nueva caja automática con convertidor de par (dejó la Powershift de doble embrague) y 6 velocidades con levas al volante, que es la misma que la marca utiliza en el Mondeo o la Kuga.

También el conocido impulsor 2.0 Duratec recibió un upgrade significativo. Al block, cabezal y cárter fabricado en aluminio y el sistema de doble distribución variable, ahora le sumó inyección directa (GDI), ofreciendo la misma potencia que en el Focus, es decir, 170 CV y 202 Nm de torque, asociado sólo a la transmisión automática de 6 marchas. Además, la versión Freestyle equipada con este propulsor es la única que puede contar con tracción integral (4WD de acople automático).

La gran sorpresa -ya que en el evento de junio la marca sólo había confirmado los motores nafteros 1.5 y 2.0- es que volverá a comercializarse la versión turbodiésel. En este caso, mantiene el motor 1.5 TDCi pero con una actualización que eleva la potencia a 100 CV (antes 90 CV) a 3.750 rpm y el par a 215 Nm (entre las 1-750 y 3.000 rpm), acoplado a una transmisión manual de 5 velocidades. De esta manera, la SUV de Ford se convertirá en la única del segmento en contar con una variante impulsada por gasoil.

7. Neumáticos:
Para la nueva EcoSport, Michelin diseñó dos neumáticos específicos, el LTX Force (en medida 205/60 R16) para uso mixto, que le aporta mayor capacidad de tracción, mejor frenado y durabilidad hasta un 35% superior a los de otras marcas, con refuerzos en su estructura y compuesto derivado del que se utiliza para el rally. La versión tope de gama cuenta con neumáticos Michelin Primacy 3 (en medida 205/50 R17) para uso sobre asfalto, que se destacan por su capacidad de frenado tanto en piso seco como mojado, mayor adherencia en curvas por su diseño con aristas y tecnología Flexmax y Stabiligrip (con refuerzo entre los bloques).

8. Otras modificaciones:
Los ingenieros de la marca hicieron hincapié en que los mayores cambios son los que no se ven pero que inciden de manera notable en la conducción. Entre ellos, podemos mencionar la recalibración del sistema de suspensión. En el tren delantero, la misma posee 17 mm más de recorrido y nuevos bujes, lo que se traduce en una mejora del 15% en la absorción de impactos y una reducción del 40% de las asperezas al volante. El eje trasero es 15% más rígido, con resortes progresivos, nuevos bujes de barra estabilizadora y un aumento del 5% en la rigidez torsional de la carrocería.

Por otra parte, otro aspecto en el que trabajaron fue la insonorización del habitáculo. Los neumáticos provistos por Michelin minimizan el nivel de ruido de rodadura, además cuenta con deflectores aerodinámicos en los bajos, capot con revestimiento acústico, manta estructural en las puertas, retrovisores rediseñados y parabrisas acústico.

El sistema de climatización también fue optimizado para adecuarse a mercados en los que predomina el calor intenso. Según datos suministrados por Ford, la mejora es del 10% en la performance del aire acondicionado.

9. La gama:
La EcoSport sigue basando su gama en 4 niveles de equipamiento: S, SE, Freestyle y Titanium, con las siguientes características:

La versión S cuenta con aire acondicionado (manual), espejos exteriores eléctricos, llantas de acero de 15 pulgadas, asiento trasero rebatible 60/40, butaca del conductor con regulación en altura, volante multifunción, dirección asistida eléctricamente, levantavidrios eléctricos delanteros y traseros, cierre centralizado, luces diurnas de Led, computadora de a bordo, sistema multimedia Sync 3 con pantalla de 4,2”, control por voz y 6 parlantes y alarma volumétrica.

La variante SE agrega barras de techo, faros antiniebla delanteros, grilla frontal metalizada, llantas de aleación de 15”, manijas y espejos color carrocería, sistema multimedia Sync 3 con pantalla táctil de 6,5” y control por voz.

El nivel Freestyle suma climatizador automático, control de velocidad crucero, tapizado de cuero/tela, computadora de a bordo con display de 4,2”, sistema multimedia Sync 3 con pantalla táctil de 8 pulgadas, control por voz, navegador y cámara de retroceso, sensores de estacionamiento traseros, palanca de cambios y volante revestidos en cuero y butaca del conductor con ajuste lumbar. Estéticamente se distingue por la parrilla, máscara de los faros antiniebla, espejos, barras de techo y las llantas de aleación de 16 pulgadas de color grafito.

Por último, la versión tope de gama, Titanium, añade parrilla con apliques cromados, sensor de lluvia, encendido automático de luces, espejo retrovisor fotocromático, apertura de puertas y arranque sin llave (con botón Ford Power), faros de xenón, llantas de aleación de 17”, techo solar eléctrico, sistema de audio Sony con 9 parlantes HiFi y tapizado de cuero con revestimientos en color arena.

10. Precios:
Con respecto a su edición anterior, los valores aumentaron entre un 3,9% y 9,7% considerando a los extremos de gama, pero desde la marca señalan que la comparación no es del todo precisa porque los últimos precios corresponden a la liquidación de stock y las mejoras en equipamiento de la versión 2018 son significativas.

  • S 1.5: $370.000
  • SE 1.5: $389.000
  • SE 1.5 AT: $408.000
  • SE 1.5 TDCi: $416.000
  • Freestyle 1.5: $420.000
  • SE 2.0 AT: $428.000
  • Titanium 1.5: $453.000
  • Titanium 1.5 AT: $482.000
  • Freestyle 2.0 4×4: $498.000
  • Titanium 2.0 AT: $510.000

Al volante:
Como señalamos al principio, luego de la presentación en el Museo del Mar tuvimos la oportunidad de subirnos a una de las 43 unidades disponibles para realizar un test drive que combinó ciudad, ruta y un pequeño tramo de caminos en bastante mal estado como para tener un breve contacto con la EcoSport 2018.

La unidad que elegimos fue una Titanium 1.5 equipada con la caja automática 6F, que nos permitió obtener una primera impresión de todas las modificaciones que introdujo el SUV de la marca del óvalo. Lo primero que nos llamó la atención fue la mejora en la calidad y el tacto de los materiales, mucho más cuidados y de aspecto más logrado, salvo algún mínimo detalle de terminación o alguna rebaba, pero indudablemente se nota un gran avance en este sentido.

Ya con el motor en marcha y rumbo hacia la ruta, nos gustó la combinación entre el impulsor y la transmisión, que administra muy bien la potencia del tres cilindros, otorgándole una muy buena respuesta, con cambios de marcha prácticamente imperceptibles, al igual que las vibraciones. La insonorización también evidencia la mejora que anunciaron los ingenieros de Ford, con nulas filtraciones de viento y el sonido del propulsor –muy agradable por cierto- que sólo se hace notar en aceleraciones repentinas.

100 km/h el 1.5 trabaja a alrededor de 2.500 rpm, mientras que a 120 ronda las 3.000/3.200 rpm. Lamentablemente, al no poder mantener una velocidad constante debido a la enorme caravana de vehículos, semáforos y el propio tránsito del camino no pudimos medir de manera precisa el consumo.

La dirección ofrece un tacto correcto, ni muy dura ni muy blanda, con asistencia progresiva. Por otra parte, las suspensiones también se muestran equilibradas, absorbiendo muy bien las irregularidades del camino. Sin ser demasiado rígidas, muestran cierta tendencia más rutera, lo que sin descuidar el confort, redunda en una mejor estabilidad.

Con esta profunda renovación la EcoSport no sólo se mantiene al día, sino que intenta posicionarse en un escalón superior. Se avecina una competencia difícil, con nuevos rivales y otros renovados, pero seguramente el producto de Ford seguirá conservando el liderazgo, razones tiene de sobra.

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